Índice
- Cifras clave
- Los empleados que han sido ascendidos tienen de media un 9,2% más de seguidores en LinkedIn que los que nunca han sido promocionados.
- Los ascendidos en un plazo de entre un año y dos años son los que más seguidores tienen, con una media de 1.047 seguidores en LinkedIn.
- La figura del vicepresidente medio tiene 1.880 seguidores en LinkedIn.
- Conclusión
- Metodología
Pero, ¿realmente merece la pena dedicar horas a convertirse en un influencer de LinkedIn? ¿Tiene correlación el número de seguidores en LinkedIn con la rapidez con la que se consigue un ascenso en el trabajo?
Para averiguarlo, analizamos 17.561 perfiles de LinkedIn de empleados de las mayores empresas presentes en el mercado español, tomando nota de su antigüedad y trayectoria profesional. Y los resultados fueron decisivos: cuanto mayor es el número de seguidores, más probable -y más rápido- es que consigas ese gran ascenso laboral.
Cifras clave
- Los empleados promocionados en un plazo de entre un año y dos años tienen casi el doble de seguidores en LinkedIn que aquellos cuya promoción duró 10 años o más (1.047 frente a 538).
- Los empleados que han sido ascendidos tienen de media un 9,2% más de seguidores en LinkedIn que los que nunca han sido promocionados.
- Un vicepresidente medio tiene 1.880 seguidores en LinkedIn, casi cuatro veces más que un asistente (475), el puesto más bajo incluido en el estudio.
- Los empleados promocionados a vicepresidente tienen una media de 1.000 seguidores más que los empleados de puestos superiores (1.880 frente a 880).
Los empleados que han sido ascendidos tienen de media un 9,2% más de seguidores en LinkedIn que los que nunca han sido promocionados.
El hombre más seguido en LinkedIn fue también el más rico del mundo durante 18 años. Bill Gates tiene 35.734.309 seguidores y sigue sumando, pero ¿existe alguna relación entre tu riqueza -o tu capacidad para ascender en la carrera laboral- y tu número de seguidores en Linkedin?
Un empleado medio que ha sido ascendido tiene 945 seguidores según el estudio, una cifra mucho más modesta. Utilizando esta cifra como referencia, podemos ver cuántos seguidores tiene el trabajador medio por empresa y por antigüedad. También podemos averiguar si los que han sido ascendidos más rápidamente tienen más o menos seguidores que la media.
Tal y cómo hemos dicho antes, el empleado medio que ha sido ascendido tiene 945 seguidores, mientras que, también según el estudio, un empleado que nunca ha sido ascendido tiene entre 865, lo que supone tener 80 seguidores menos.
Esto significa que un empleado que ha tenido al menos un ascenso tiene un 9,2% más de seguidores en LinkedIn que un empleado que nunca ha sido ascendido.
Los ascendidos en un plazo de entre un año y dos años son los que más seguidores tienen, con una media de 1.047 seguidores en LinkedIn.
Hemos visto que, de media, alguien con más seguidores tiene más probabilidades de ser ascendido, pero ¿los que tienen más seguidores son ascendidos más rápido y por cuánto?
Los que ascendieron en el plazo de un año a dos años tenían más seguidores que nadie, con una media de 1.047, es decir, 1,9 veces más que los que tardaron 10 años o más en ser ascendidos, que tenían la media más baja, 538 seguidores.
Aunque hubo algunas fluctuaciones notables (por ejemplo, los ascendidos en un año o menos tenían 895 seguidores), en general, los que fueron ascendidos en menos tiempo tenían más seguidores en LinkedIn.
La figura del vicepresidente medio tiene 1.880 seguidores en LinkedIn.
Con el tiempo llega la experiencia, y con la experiencia llegan las conexiones. A medida que construyes tu red profesional a lo largo de años de trabajo, no es de extrañar que un empleado ascendido a vicepresidente desde dentro de la empresa tenga casi cuatro veces más conexiones que un empleado medio ascendido a asistente (1.880 frente a 475).
Se ha observado una correlación positiva constante entre un mayor número de seguidores en LinkedIn y el puesto de trabajo, sobre todo a medida que se asciende en la escala profesional. El salto más notable en el número de seguidores de LinkedIn se produce entre un empleado con el puesto de director y un vicepresidente, con una diferencia de hasta 1.000 seguidores.
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Conclusión
Los datos dibujan claramente una correlación entre el número de seguidores que tienes y el índice y la probabilidad de que te asciendan en una gran empresa. Pero, ¿se trata de un sesgo consciente? ¿Acumular seguidores en LinkedIn garantiza el éxito o es sólo un subproducto del tiempo y la influencia?
Bill Gates, Richard Branson y otras de las personas con más seguidores en LinkedIn, que ya tenían éxito e influencia antes de que se creara LinkedIn, probablemente no atribuyan su éxito estratosférico a sus perfiles en las redes sociales. Su influencia ya estaba consolidada antes y fuera de LinkedIn.
Pero, para aquellos que saben cómo jugar el juego, crear contenido atractivo, e interactuar de forma proactiva, es totalmente posible que LinkedIn ayude a impulsar su carrera.
No sólo uno de estos seguidores o conexiones puede resultar útil, sino que, si se utiliza estratégicamente, una gran presencia en los medios sociales crea lo que en psicología se llama un «efecto halo»: Como alguien tiene muchos seguidores, también suponemos que debe tener éxito, ser inteligente y bueno en su trabajo (aunque nada de eso sea cierto).
Metodología
Se ha analizado el historial profesional y el número de seguidores de unos 950-1.000 empleados por empresa en Linkedin. En los casos en los que no había suficientes perfiles de empleados para analizar, se eligió la siguiente empresa más grande de la lista. En total se analizaron 19 empresas.
El estudio también clasificó estos tipos de trabajo en diferentes niveles de antigüedad:
- Asistente
- Ejecutivo
- Supervisor
- Subdirector
- Director
- Vicepresidente
